miércoles , octubre 26 2022

¡Chile necesita Startups hoy más que nunca!

La gente me pregunta a menudo qué deben hacer para hacer frente a la amenaza inminente de la transformación digital. Y tienen buenas razones par ello.

Por Patrick Mork

Después de más de 10 años trabajando en el Valle en startups y luego como el primer jefe de marketing de Google para crear Google Play, he visto que la tecnología irrumpe completamente en más de una industria. He sido testigo de cómo la tecnología remodela la forma en que trabajamos, vivimos, jugamos y cómo puede destruir industrias perfectamente estables que se creía que eran inexpugnables hace sólo 5-10 años.  

Durante el año pasado, he hablado en numerosas conferencias y cenas de negocios sobre la transformación digital y mi mensaje nunca había sido tan cierto como lo ha sido después de lo que los chilenos han experimentado en las últimas semanas:

“Para dominar los cambios en los negocios y en la sociedad no necesitamos la Transformación Digital, necesitamos la Transformación Cultural»

Durante el último año, he tenido el privilegio de trabajar y entrenar a una serie de ejecutivos chilenos tanto en nuevas empresas como en empresas más establecidas, y a lo largo de este proceso puedo decir que he conocido y trabajado con gente inteligente, trabajadora, creativa y motivada.

He trabajado con personas que son apasionadas por lo que hacen y son apasionadas por su país, pero hay una gran diferencia entre los CEO’s de compañías tecnológicas jóvenes y sus hermanos mayores que dirigen compañías tradicionales.  

La mayor diferencia entre los dos tipos de CEOs es que mientras uno aprecia la necesidad de una visión del futuro poderosa y audaz y ve la importancia de una cultura empresarial que nutre e impulsa esa visión, el otro está a menudo más enfocado en la cuota de mercado, el EBIT y los ingresos.  

La razón por la que Google tiene tanto éxito es su enfoque en su visión, su cultura y su gente, no por la tecnología, los beneficios y la subida de los precios de las acciones. Y la razón por la que tantas startups exitosas provienen de Silicon Valley es que muchas han emulado el enfoque de Google en Visión, Cultura y Gente.

¿Por qué es importante Visión o Propósito?

La visión de Google es: hacer que la información del mundo sea universalmente accesible y útil. Cuando miras sus productos insignia desde Search, a Chrome, a YouTube o Google Play, eso es lo que hacen, te están ayudando a encontrar la información o el contenido que necesitas y te lo están haciendo útil. 

Es el hecho de que Google es una empresa impulsada por Visión / Propósito donde la gente cree que todo es posible si trabajas lo suficiente, lo que hace que los mejores talentos quieran trabajar allí. Es el hecho que sienten que están causando un impacto y haciendo algo que es más grande que ellos mismos, que su trabajo importa.  

Cuando entro en una oficina de un CEO o en una sala de juntas en Chile y les pregunto cuál es su visión, la respuesta habitual que recibo es la de «ser un líder en nuestra industria» u «ofrecer el mejor producto o servicio posible» o «entregar valor a nuestros accionistas». El problema es que la mayoría de los colaboradores no se inspiran en la cuota de mercado, la eficiencia o el valor para el accionista.

Sebastian Ojeda, cofundador y CEO de Beetrack, una empresa chilena que proporciona tecnología para el seguimiento de la última milla de entregas para grandes minoristas como Cencosud y Ripley, y un empresario que ha sido mi coachee, lo entiende, juntos elaboramos la Visión de Beetrack para la compañía, que es simple: Crear Momentos de Felicidad.  

¿Por qué?

Porque cada vez que un cliente recibe un paquete, se alegra el día y los colaboradores de Beetrack pueden sentir que están haciendo algo mucho más importante que simplemente entregar paquetes. Están creando momentos de felicidad. 

Pero «crear momentos de felicidad» no es simplemente una bonita declaración de visión o un eslogan de marketing, impulsa lo que la compañía hace para que cuando Beetrack tenga que tomar decisiones críticas sobre un producto o qué colaborador contratar o si deben expandirse a México, regresen a su Visión y se hagan la pregunta:  «¿Esto nos ayuda a crear más momentos de felicidad o no?»

Cultura y Gente

La segunda cosa que hace que las startups de Google y Silicon Valley sean exitosas y algo que los empresarios tecnológicos chilenos han captado rápidamente, es el énfasis en la creación de una poderosa cultura empresarial. 

Startups
Patrick Mork

La cultura nunca ha sido más importante que hoy, una encuesta de Deloitte y Touche en diciembre de 2018 ilustró esto con un efecto sorprendente cuando encuestaron a más de 10.000 milenials (314 de los cuales eran de Chile) que después del salario (ya que la vida, cómo saben, se ha vuelto cada vez más cara), lo más importante para los milenials fue una «cultura positiva en el lugar de trabajo», seguida de horarios flexibles y la oportunidad de aprendizaje continuo.

Por ejemplo, en Talana, una startup de tecnología de RRHH cuya visión es «rediseñar la forma en que trabajamos», el CEO y cofundador Pablo de la Barra, que también es mi coachee, comparte abiertamente el rendimiento financiero de la empresa con todos los colaboradores de la empresa. ¿Por qué?  Porque, como dice el propio Pablo, «si la transparencia es tan importante para nuestra cultura, ¿qué dice si no compartimos los resultados de la empresa con nuestro equipo?  

Pero, ¿de dónde viene la cultura?  La cultura de la empresa es un producto de valores centrales y sistemas de creencias compartidos, pero fundamentalmente las personas que crean e impulsan la cultura son los fundadores y los primeros colaboradores de la propia empresa.  

Por ejemplo, Diego Stevens, un emprendedor al que también hago coaching, ha llevado la cultura y la importancia de los colaboradores a un nivel completamente nuevo. En Cleverit, una empresa de tecnología que cofundó y que ha crecido de 5 a 55 colaboradores y ha generado varios millones de dólares en ingresos en el último año, él y sus cofundadores crearon planes detallados de carrera para todos sus colaboradores para asegurarse de que la gente no sólo esté entusiasmada con el ritmo de crecimiento de la empresa, sino también con lo que es posible para ellos personalmente a medida que crecen y se desarrollan profesionalmente.  

¿Qué significa esto para Chile?

Los desafíos de Chile no son únicos, he vivido en 11 países y he trabajado en 6 de ellos y si se mira lo que está pasando en Líbano, Bolivia, Perú, Estados Unidos (con Trump), Brexit en el Reino Unido y las protestas de los gilets jeunes en Francia, estamos viendo el surgimiento de un patrón muy aterrador, la gente clama por el cambio y los políticos no quieren o no pueden adaptarse con la suficiente rapidez a las necesidades cambiantes, el sistema parece estar fallando.   

Así que la pregunta es «¿quién puede conducir el cambio más rápido?»  Los negocios pueden. Y, en particular, las pequeñas y las nuevas empresas. El año pasado, Chile tuvo su primer éxito con el intento de venta de la nueva empresa chilena Cornershop a Walmart (la empresa fue adquirida posteriormente por Uber). Chile ha visto una serie de otros éxitos notables en la puesta en marcha, incluyendo Not Co, Fintual y Sosafe, entre otras.

Chile necesita nuevas empresas, muchas más. Aquí está el porqué:

Las nuevas empresas impulsan una mayor competencia que reduce los precios y ofrece a los consumidores mejores productos y un mejor servicio al cliente.

Las nuevas empresas absorberán el talento de las grandes empresas existentes y las obligarán a cambiar la forma en que gestionan e incentivan a sus colaboradores.

Las nuevas empresas, con sus estructuras más transparentes e igualitarias, empezarán a obligar a las grandes empresas a empezar a cambiar sus propias culturas y formas de hacer negocios.

Estas actuarán como un imán para el talento regional de otros países que pueden aportar la experiencia y las habilidades necesarias para ayudar a impulsar el ecosistema de nuevas empresas en Chile (Recorrido.cl, la aplicación de transporte de autobuses en línea número 1 en Chile, fue fundada por 5 alemanes que la trasladaron en parte gracias a las subvenciones otorgadas por Corfo).

Estas empresas ayudarán a diversificar la economía de Chile, alejándola del cobre, el salmón y otros sectores tradicionales, lo que creará puestos de trabajo, crecimiento y, potencialmente, una mayor distribución de la riqueza.  

No hay duda de que los desafíos de Chile son de largo alcance y complejos, y no hay una solución milagrosa para brindar alivio inmediato a muchas personas que han sufrido, pero aparte de los beneficios obvios que se ofrecen más arriba, las nuevas empresas proporcionan inspiración y oportunidades para muchos que podrían sentir que han sido dejados de lado en el frío.

Ya sea en Chile, Silicon Valley o Londres, cuando la gente ve a los emprendedores asumir el orden establecido, brindar un mejor servicio, un ambiente de trabajo más transparente e igualitario y la oportunidad de progreso y crecimiento personal, terminan proporcionando un elemento muy importante al que los chilenos no pueden ponerle precio en estos días: Esperanza.  

 

Patrick Mork Revista Valora

 

 

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