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El coronavirus no sólo nos enferma, también golpea duramente a las economías, a los mercados e inversiones de todo el mundo. A medida que más se propaga el virus, también lo hacen sus consecuencias negativas.
Y es que no es un misterio que nuestra economía ya está bastante resentida debido al estallido social que sacudió el país el pasado año, a lo que ahora debemos sumar los efectos del Covid-19.
Por eso, Piñera anunció un plan económico por más de US$11 mil millones para paliar los efectos de la crisis sanitaria sobre la producción, el empleo y el comercio.
¿Qué consecuencias inmediatas tendrá? ¿Cuánto demorará en mejorarse? ¿Conviene invertir en estas circunstancias?
Impacto directo del coronavirus en los mercados e inversiones
La catalogada por la OMS como una pandemia ya se ha llevado miles de vidas por todo el mundo. La tasa de contagios incrementa y el escenario podría complicarse cada vez más.
El ministro de Salud, Jaime Mañalich, afirmó que es posible llegar a la primera semana de abril con más de 40 mil personas contagiadas en el país. Y es que, en apenas tres días, se duplicó la cantidad de casos.
Eso llevó a Piñera a decretar el estado de catástrofe nacional por 90 días. Esto permite la restricción de reuniones, la distribución del servicio y la reserva de alimentos, y el orden de cierre de todos los centros comerciales.
Esto afectará bruscamente a nuestra economía, a los mercados e inversiones. Entre los sectores más afectados están los relacionados con servicios como el retail, los centros de ocio, restaurantes y, por supuesto, las aerolíneas. Explica el Gerente General de Servicios Financieros Contempora, José Luis Jara.
Otro efecto del coronavirus en los mercados e inversiones es la significativa caída de los precios de las materias primas. Por ejemplo, el cobre se ha desplomado más un 6% en la Bolsa de Metales de Londres, y se acerca a los US$ 2 por libra, su peor en nivel desde hace tres años.
«Toda esta situación podría generar la destrucción de múltiples puestos de trabajo y una fuerte caída en los ingresos de las empresas, lo que les podría impedir hacer frente a sus compromisos financieros y que, incluso, lleguen a quebrar», advierte el experto.
Para él, el principal problema es que aún no hemos alcanzado el punto de mayor profundidad del virus, por lo que es difícil predecir qué va a suceder. Lo que asegura es que no podremos ver una recuperación a los niveles previos al estallido social y el coronavirus antes de 24 meses.
¿Qué sucederá con nuestra economía?
Es imposible hablar de esta situación sin pensar en la crisis subprime que afectó a la economía mundial.
El inversionista Ruchir Sharma, en una columna para el New York Times, revela que la deuda en el sector empresarial de EEUU asciende al 75% del PIB del país, rompiendo el récord establecido en el año 2008.
Si bien esta crisis no impactó directamente en Chile, el PIB del país cayó un 4% ese año por su gran apertura al comercio internacional. Sin embargo, los expertos prevén que la actual situación podría llegar a tener el doble de impacto económico del coronavirus en los mercados e inversiones.
El analista senior de Alfredo Cruz y Cía, Arturo Curtze, señala que la diferencia con la crisis de 2008 es que aquella tuvo una recuperación en V, es decir, se paró bruscamente la economía, pero la vuelta a la normalidad también fue rápida.
Sin embargo, en esta ocasión se pronostica una recuperación en forma de U, ya que los indicadores económicos van a tardar más tiempo en llegar a los niveles a los que se encontraban antes de la recesión.
Eso se suma a la incertidumbre sobre cuándo acabará todo esto. Para el experto, cuanto más dure el contagio, más va a tardar la economía en volver a la normalidad, nuestros mercados e inversiones.
Para él, los efectos van a ser mayores en la medida que no aflore lo mejor del ser humano, desde que los bancos pospongan el pago de las hipotecas, que se alivie la carga financiera de las personas o que las empresas otorguen facilidades a sus trabajadores fomentando el teletrabajo.
Por eso, destaca la importancia del recién anunciado paquete de Piñera de US$11 mil millones, que equivale al 4,7% del PIB del país, y que cree ayudará enormemente a combatir la crisis que espera no dure más de tres meses.
¿Conviene invertir en este momento?
Son momentos complicados, eso está claro. Especialmente porque todavía no podemos predecir el efecto del coronavirus en los mercados e inversiones.
Curtze recomienda que los clientes de renta fija bajen la previsión de sus carteras a fondos de no más de un año, igual que a las personas de más de 55 años de renta variable a las personas de más de 55 años.
Además, habla de que, cuando todo se solucione, los commodities van a subir y con ello el tipo de cambio va a caer. Por eso, el consejo es invertir en ese momento en renta variable en países emergentes de latinoamérica.
Otra recomendación es esperar a ver como evoluciona Estados Unidos, para comprar equity de renta variable cuando la tasa de contagio empiece a decrecer o cuando encuentren la vacuna.
Por su parte, Pablo Solís, jefe de Renta Variable Institucional de Tanner Investments, afirma que la clave hoy es diversificar entre distintos tipos de instrumentos, no concentrar todo en una clase de activos.
«Hoy es posible encontrar vehículos para exponerse a casi todos los activos: inmobiliarios, oro, otros commodities, renta variable, renta fija, caja, etc. Si no quiere enfrentar riesgo, tomar algún depósito puede ser una buena opción», explica el experto.
Además, habla del viejo adagio “compra cuando suenen los cañones, vende cuando toquen los violines”. Y es que en escenarios de alto estrés es cuando aparecen las oportunidades dado el extenso selloff (oleada de ventas) de las acciones.
En definitiva, es muy difícil predecir cuánto tiempo más se va alargar esta situación y los efectos que generará. Lo único que podemos hacer por el momento es cuidarnos, tanto desde el plano de la salud como del económico, y pensar bien nuestras decisiones de inversión, que bien jugadas podrían convertirse en grandes oportunidades.
